Estaba leyendo una revista cuando, como siempre, ha tenido que aparecer la palabra "amor". No sé como lo hago pero siempre tengo que encontrármela por algún sitio. Bien, pues he decidido leer lo que ponía.
A veces, las personas, continuamos un camino sin haber cumplido nuestras expectativas. Eso, en cierto modo, es malo. Me refiero a que no siempre es bueno pasar página. Verás, el artículo hablaba de aquellas personas que, pasados unos años de su juventud, seguían constantemente con el vivo recuerdo de su primer amor.
Todas estas cosas son las que más me hacen pensar. ¿Sería buena opción pasar página para encontrarme con otra persona? Si esto es así, las posibilidades de que me siga acordando de ti día a día, son bastante altas. No obstante, me gustan mucho más esos artículos que hablan de armarse de valor. Son esos los que leo con más frecuencia.
El miedo a equivocarnos es aquello que me echa atrás, y a ti también. Pero no todo es eso, como decía una psicóloga de la cual no recuerdo el nombre, el futuro es únicamente un proyecto que aparece para no dejarnos saborear con tranquilidad el presente. Mi presente quiero que seas tú, y quizás también mi futuro, pero no voy a pensar en el futuro, quiero pensar en el presente, vivir el presente, vivir algo bonito... y vivirlo contigo. Sé que es difícil así que, que el tiempo y el destino sean quienes tomen el control de todo esto.
¿Ahora es cuando se supone que tengo que entender la situación? ¿Qué pasa?
Pasa que ahora es cuando te has dado cuenta. Ahora es cuando empiezas a percibir la realidad, y no a ver lo que tú quieres ver. Pasa que no es verdad, que sólo interviene por hacer más negro el asunto.
Pasa que el cielo se ha abierto en el oceano, y ahora todo es azul claro, pero hay tormentas a lo lejos. Que el mayor bien es pequeño. Que el pez aquel verde que radiaba felicidad ahora flota sobre el río más desdichado de la zona. Y que aquel vagabundo, que decía no tener casa pero era feliz, ya no lo es. Ahora ha percibido lo que realmente es.
¿Cuándo dejaremos de ver lo que nosotros queremos? A veces incluso nos esforzamos tanto por ello que ni siquiera vemos lo que queremos, sino todo lo contrario, vemos lo que odiamos ver. Vivimos engañados. ¿Quién sabe si por tu vecino, tu amigo, tu primo o por una revista? El caso esque lo estás, estás engañado. Sigue engañándote si quieres, pero te digo, no te fíes de nadie.
De lo que oyes no te creas nada... Y de lo que ves, creéte la mitad.
Pasa que ahora es cuando te has dado cuenta. Ahora es cuando empiezas a percibir la realidad, y no a ver lo que tú quieres ver. Pasa que no es verdad, que sólo interviene por hacer más negro el asunto.
Pasa que el cielo se ha abierto en el oceano, y ahora todo es azul claro, pero hay tormentas a lo lejos. Que el mayor bien es pequeño. Que el pez aquel verde que radiaba felicidad ahora flota sobre el río más desdichado de la zona. Y que aquel vagabundo, que decía no tener casa pero era feliz, ya no lo es. Ahora ha percibido lo que realmente es.
¿Cuándo dejaremos de ver lo que nosotros queremos? A veces incluso nos esforzamos tanto por ello que ni siquiera vemos lo que queremos, sino todo lo contrario, vemos lo que odiamos ver. Vivimos engañados. ¿Quién sabe si por tu vecino, tu amigo, tu primo o por una revista? El caso esque lo estás, estás engañado. Sigue engañándote si quieres, pero te digo, no te fíes de nadie.
De lo que oyes no te creas nada... Y de lo que ves, creéte la mitad.
Y poco a poco cada persona se va perdiendo. Te limitas a querer, no sabes hacer otra cosa. Te pierdes. Inundas cada poro de tu piel de él. Y te pierdes, te sigues perdiendo. No puedes ver más allá. Pero finalmente has conseguido arrancar su amor de tu piel, te has podido despegar, y has visto una luz que antes era imposible de ver, pues la misma luz era la que te cegaba. Sigues queriéndole pero no tanto como antes, bueno, quizás más, pero no de la misma forma. Quien te quiere te ha hecho ver que nada te aporta, simplemente problemas. Te has perdido a ti misma, no has visto más allá de tus posibilidades. Te pensabas que eras alguien que realmente no eras. ¿Y cómo has conseguido salir de eso? Pues todos lo consiguen, antes o después. Nadie es prisionero de amor. Si uno quiere, puede lograr lo que se propone. Estoy segura. Tú lo has conseguido. Puedes ser un ejemplo a seguir.
Y esto... nunca te lo he dicho.
Solo puedes pensar
quieres caminar
nunca debes admirar.
Solo sabes divagar
nunca quieres imaginar
y así te lleva a superar,
superar más allá de las risas del bar.
Y nunca sabes como actuar
te vas consumiendo en ese bar...
Podría reconocer esta imagen en cualquier sitio. No sé que me ha pasado con esta tierra. Pero es oir las gaitas, las olas de las playa, o simplemente su acento, y me entra un cosquilleo en la barriga cual niña tonta enamorada. Pero este amor es distinto, no es hacia nadie en concreto, es hacia un lugar. Estoy segura de que poca gente podrá comprenderme. Pero creérme, no hay muchas cosas más satisfactorias que aterrizar bajo un espeso cielo lleno de nubes grises, con gotitas que para nada se acercan a lo molesto, esos 15 grados en verano, poco sol, verde, mucho verde, agua y musgo donde es casi imposible pensar que puede nacer vegetación. Lo cierto esque estoy enamorada de esta tierra. Saber que estoy en ella, me hace sentir en mi casa, aunque realmente no lo sea. Pero 7 años, que se dicen pronto, dan para mucho. Porque quiero volver durante mucho más tiempo, quiero crecer con ella! Jamás dejaré de amarla.
Galicia, sí, es única.
No sé porqué a menudo nos abordan comentarios como “el amor es lo que realmente importa y mueve el mundo” cuando después nos invaden otros como “los amigos es lo mejor que hay, son los que nunca te van a faltar”. No entiendo esa clase de adversidades, ¿Cómo las explicamos? ¿Cómo me las explican? A mí, que pendo tanto de él como si fuera mi más adictiva anfetamina. Quizás haya aprendido a sobrepasar esos límites, y a bajarme más. Quizás ya no pendo tanto como pendía, o como creo yo que pendo. Quizás… Son tantos quizás que no doy abasto. Y a pesar de todo lo malo que haya podido pasar, admito que ahora solo deseo que en un futuro, todas estas afirmaciones dubitativas, sean realidad. Y con eso, sería feliz.
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